Un Oscar para Carlos Joaquín

Carlos Joaquín González, quien fungió como gobernador de Quintana Roo —lo expresamos así porque no podemos decir “gobernó”— fue, con plena seguridad, el peor mandatario estatal de la historia, pero habremos de reconocer que fue también un actor asaz prominente, que ha sido injustamente ignorado por la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas de Hollywood en el otorgamiento del Oscar.

Es impactante la capacidad histriónica del contador público yucateco que estuvo al frente del poder ejecutivo de la entidad caribeña de 2016 a 2022, ya que el contraste entre la percepción pública de su desempeño y la realidad es por lo menos intenso. El tema ultrasensible de la seguridad  pública, en el que Joaquín fue reconcido en el estado, el país y hasta en ámbitos internacionales como un adalid, y el presidente Andrés Manuel López Obrador siempre fundamentó su aprecio y reconocimiento hacia él, incluso nombrándolo. apenas concluida su gestión, embajador en Canadá.

Todo fue un enorme fiasco. La inseguridad, aparejada an muy próspero auge de la delincuencia organizada, fueron los verdaderos rasgos de la gestión joaquinista. Un dato espeluznante del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) echa para abajo el argumento del vodevil en el que el exgobernador se presenta como paladín de la justicia y la seguridad.

Bajo el gobierno de Félix González Canto, en el año 2009 hubo 141 homicidios y en 2010 la cifra se incrementó ligeramente a 145 óbitos por ese concepto; en el siguiente año, que por el calendario político de Quintana Roo compartió unos meses con Roberto Borge Angulo, hubo también un incremento, pero a niveles por debajo de la media nacional, con 163 fallecimientos.

Durante el periodo constitucional de Borge las cifras se mantuvieron estables y en relativa correspondencia con el crecimiento demográfico, pues en 2012 se registraron 154 decesos, 164 en 2013, luego un descenso a 125 en 2014, para elevarse a 145 en  2015 y 193 en 2016.

Pero dicha estabilidad se rompió brutalmente en el primer año de gobierno del negligente Carlos Joaquín, pues la cuenta se disparó a ¡445 homicidios!. Mas no bastando esa explosión violenta, en 2014 casi se duplicó, llegando al hórrido número de 841 decesos violentos al añp siguiente.

Empezaron las alarmas, las críticas y los señalamientos, pero la antedicha habilidad actoral del hijo que el patriarca libanés y tatich de Cozumel, el honorable Nassim Joaquín Ibarra, que también engendró al hermano mayor del personaje en comento, reconocido exgobernador, notable en Cuba y político de las grandes ligas nacionales, Pedro Joaquín Coldwell, mantuvo engañado al presidente López, que acabó mandándolo a Ottawa no solo como premio, sino sobre todo como patente de impunidad, bien lejos de Quintana Roo, en donde difícilmente podrá responder por sus múltiples felonías.

Desde luego hay cada vez más quintanarroenses a los que ya se les cayó el tapa ojos y están comenzando a exigir que Joaquín González sea llamado a cuentas. En nota de hoy de la agencia Marcrix, que dirige Cristina de la Cruz, adera, leemos:

“El Partido Acción Nacional (PAN), a través del diputado federal Ernesto Sánchez, exigió que se investigue al exgobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, tras las graves acusaciones lanzadas por el exalcalde (de Solidaridad, hoy Playa del Carmen) Gabriel Mendicuti Loría, quien afirmó que durante su sexenio se pactó con Grupos del crimen organizado.

“’Las personas que estén involucradas, exfuncionarios de gobierno, exgobernadores, presidentes municipales, acyuales o no, deben ser investigadas y castigadas con todo el rigor de la ley’, expresó el legislador panista”.

El periódico Por Esto!, que dirige Renán Castro Madera, publicó hoy ampliamente recomendada información sobre el caso Carlos Joaquín, con artículos que prácticamente no  dejan dudas se las graves faltas que cometió como gobernador.

Se acabó el sexenio, bajó el telón y llegó la hora de ir al camerino para desmaquillarse y cambiarse los ropajes de carácter por los cotidianos, así que el embajador, ahora de Claudia Sheinbaum Pardo, en el país de la hoja de arce (maple es palabra inglesa) está viendo exhibidas sus miserias reales con cada vez más crudeza.

Ya veremos si Sheinbaum lo deja vivaquear en la norteña embajada lo que resta de su sexenio para extraerse de la acción de la justicia, o lo devuelve a la vida civil en México, donde le restan muchas cuentas por rendir, lo cual, nos tememos, para el comediante Carlos, requeriría de un buen deus ex machina.

HOMÚNCULOS

El de la letra, que tuvo una larga y profunda amistad con Nassim Joaquín Ibarra, de alguna manera agradece que la prolongada y fructífera existencia del Taticho no se hubiese prolongado tanto como para conocer, con la certeza que hoy hay, los pormenores de las felonías de su hijo menor, y aunque el exgobernador Pedro Joaquín Coldwell, a quien también conocemos —sobre todo por cuestiones periodísticas— siempre tuvo una actitud generosa hacia su medio hermano, nada debe acongojarle, pues todo México, y sobre todo Quintana Roo entero, sabe muy bien quién es quieni.

GRILLOGRAMA

Madriguera…

No cree le amenacen males

Joaquín, que se ha guarecido

Y va desapercibido

En faldas presidenciales

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