top of page
Buscar

Mara y Leslie conformarán al estado

  • Foto del escritor: Óscar González Ortiz
    Óscar González Ortiz
  • 15 feb 2022
  • 4 Min. de lectura


(COLUMNA EN NOVEDADES). La telenovela de Roberto Palazuelos (con segundo apellido francés, que no recordamos por el momento) está solamente en las notas de los reporteros enamorados de sus lindos ojos, su perfil griego y su boca besadora, por ser wanabís mayas morenos, bajitos y panzones que recibieron veinte pesos del exgalán telenovelero; lo cierto, aunque, amén de casos patéticos como el de Cuauhtémoc Blanco en Morelos y de algunos faranduleros más metidos en política con cero éxito, seguramente concluirá hoy que esto tecleamos mientras Movimiento Ciudadano lo echa con cajas destempladas o lo arropa para contender por la gubernatura de Quintana Roo. En cualquier caso, la zalamería de los tristes colegas está para echarse a llorar.

La verdad es que el panorama de la otrora oposición conformada principalmente por el PAN y el PRD no tiene ni en sus sueños más calenturientos alguna posibilidad de sacar algo de la próxima elección, mas sí pinta, tal vez no para ganar, pero sí para significarse como fuerza política en la entidad el PRI de Leslie Hendricks Rubio, joven talentosa y muy bien apreciada por la sociedad quintanarroense.

La convocatoria, aunque suene rancia, incluye a los exgobernadores más poderosos del estado, a una plétora de empresarios y a muchos ciudadanos nostálgicos de los viejos tiempos del PRI omnipotente, que finalmente les resolvía esas necesidades básicas que los ulteriores gobiernos de otros colores ni siquiera tuvieron a bien tomar en cuenta, incluyendo el presente.

Ya que nos resistimos, por dignidad, a pensar que Palazuelos pudiera llegar a gobernarnos, tendríamos que suponer que la diada Mara-Leslie sería la que nos brindara la próxima gubernatura, lo cual nos deja en una perspectiva –muy aparte del tema de género– altamente positiva: ambas jóvenes políticas pudieran ser garantía total para el buen desempeño del estado.

Es notorio que el liderazgo de Mara Lezama en la contienda, hoy por hoy, es muy dilatado: la reelecta alcaldesa de Cancún lleva, merced a su buen desempeño y a su carisma, todas las ventajas sobre sus competidores, por lo que la brega de Leslie será contracorriente, pero los quintanarroenses, en caso de ser descartado el payaso Palazuelos, podemos sentirnos seguros de que tendremos un gobierno muy digno para el siguiente sexenio, encabécelo quien lo encabezare.

Es obvio que al mismo tiempo que su mentor y guía político es su mismo progenitor, los pros para Leslie Hendricks pueden ser neutralizados por la poca comprensión de la que gozó su padre Joaquín, un gobernante incomprendido por sustentar una visión de futuro que ni siquiera, dos décadas después, se le ha ocurrido a un mandatario estatal: el chetumaleño se adelantó a su tiempo y, con grandes activos como Iván Hernández Pacheco y otros ilustrados técnicos, había concebido un plan a 25 años de desarrollo, que sus sucesores no planearon ni en su propio sexenio.

La hija, a quien le tocó asumir altas, altísimas responsabilidades gubernamentales cuando apenas salía de la adolescencia, es una consumada líder y administradora pública, con extenuante probanza en el DIF estatal y en la rectoría de la Universidad Tecnológica de Cancún, que por cierto es dueña de la simpatía de los quintanarroenses, lo cual pende en buena medida del cariño que todos sentimos por su madre, María Rubio Eulogio, mujer entregada, hasta el día de hoy, a las causas más sensibles de la población vulnerable de Quintana Roo.

Mara Lezama lleva las de ganar; no por nada ratificó su gobierno al servicio de la población del municipio, Benito Juárez, el más populoso y económicamente importante del estado. La también periodista –más conocida por el oficio del micrófono y por su incisiva labor social– ha logrado los más altos momios en las mediciones demoscópicas; es poco probable que alguien le arrebate la primera magistratura del estado en la sucesión de Carlos Joaquín González

Un fantoche como el histrión Palazuelos puede estar dando lata a los quintanarroenses en happenigs o realities, pero creemos, incluso en tratándose de adolescentes que buscan a sus favoritos entre los actores más guapos, tendrán conciencia de lo que más importa para el estado.

Aquí el litigio es entre dos –o tres– jóvenes mujeres brillantes.


HOMÚNCULOS

La legisladora Iris Mora, futbolista, que todo lo hace con las patas, incluso pensar, quiere atropellar la Constitución en su heroica defensa de la libertad de expresión con una estulta propuesta de censura por supuestos ataques de los periodistas a la privacidad, que se entienden más bien como patente de corso de los servidores públicos para disponer de los recursos de todos los mexicanos y así agenciarse una vida de pachás persas.

Esta amante de las pelotas, devenida en congresista, sin haber evolucionado un ápice de su oficio que solo conecta las extremidades inferiores con el cerebro, y nada más, busca atacar a la libertad de libertades de manera rastrera y lamebotas, con el impresentable presidente López.

Por favor: guárdese para sus ratos libres y paseos dominicales las chuladas que hace con las patas: los periodistas en México somos libres.


GRILLOGRAMA

Marioneta…


El muñeco Palazuelos

De tanto haberse jugado

Ya luce más bien tirado

Por estos inmundos suelos


columnacafenegro@gmail.com

 
 
 

Comments


Who's Behind The Blog
Recommanded Reading
Search By Tags
Follow "THIS JUST IN"
  • Facebook Basic Black
  • Twitter Basic Black
  • Google+ Basic Black

Presentado también en

 ¿Te gusta lo que lees? Dona ahora y ayúdame a seguir elaborando noticias y análisis. 

Donar con PayPal

© 2023 por "Lo Justo". Creado con Wix.com

bottom of page