Regidores capitalinos, facciosos
Los concejales de Othón P. Blanco se disponen a desmantelar al ayuntamiento solo para dejar al presidente municipal como un pelele, sin poder de acción en los hechos, desapareciendo áreas fundamentales para la gobernabilidad y asumiendo directamente e ilegalmente la función ejecutiva del municipio.
Es más que vergonzoso que los regidores de un municipio tan menesteroso como lo es Othón P. Blanco, cuya cabecera es la sufrida capital de Quintana Roo, Chetumal, estén ocupados de tiempo completo en disputarse el predominio del cabildo en vez de resolver los graves problemas de la ciudad y de la extensa área rural que lo integran.
La basura, las raras veces que se recoge, se bota a cielo abierto. El alcalde Otoniel Segovia Martínez (Morena) por lo menos ya llama “tiradero” al nauseabundo terreno que está insanamente pegado a zonas residenciales del norte de Chetumal y al poniente de la alcaldía de Calderitas, abandonando el abstruso eufemismo de “relleno sanitario”, cínica ficción con la que se referían a esa inmundicia sus antecesores. La empresa recolectora Amex Eco Solutions ya está fuera con todo y los camiones de recoja que le rentaba al ayuntamiento, así que dada la legendaria incapacidad de la depauperada Dirección General de Servicios Públicos Municipales, que encabeza Jaime Alejandro Valle Villaseñor, de hacerse cargo del problema, la urbe pronto será de nuevo toda ella un vil basurero.
Con la movilidad es la misma cosa. Es más: nunca en la historia de Chetumal ha existido realmente el transporte público, como no sean algunas camionetas rapazuelas y destartaladas que como viruelas locas de repente cruzan la ciudad, atestadas, un proporcionando un servicio tan malo como escaso.
Pero incluso desde que asumió la presidencia municipal el finado Hernán Pastrana Pastrana el cabildo está consagrado a las pugnas intestinas, lo que se agudizó con el relevo de Otoniel Segovia: en el cuerpo colegiado el primer concejal solo cuenta con el apoyo de su yerno José Luis Martínez Murrieta Bautista, de Gabriela Santiago Hernández, de Rufina Cruz Martínez, y de Emmanuel Torres Yah, pero sus mayoritarios opositores le bloquean toda iniciativa y decisión solo por incordiar; por el placer de ser.
A pesar de que un enemigo jurado de Segovia, Manuel Valencia Cardín, fue echado del cuerpo edilicio por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación por negligente –peleará en la Sala Superior– y sustituido por Sergio Zapata Vales, a quien los enemigos del alcalde bloquearon hasta donde pudieron porque acusó a varios de ellos y a funcionarios por actos de corrupción, incluyendo intentos de extorsión, los que quedan están decididos a arrebatarle el gobierno al alcalde.
Por estar integradas por funcionarios “otonistas”, la furibunda síndica Yensunni Idalia Martínez Hernández (¡Morena!) y los rijosos regidores opositores al presidente municipal pretenden desaparecer la Secretaría Técnica, la dirección de Comunicación Social y la Oficialía Mayor, cuyas atribuciones y las cinco direcciones que controla (Recursos Humanos, Recursos Materiales, Servicios Generales, Patrimonio Municipal y Profesionalización y Capacitación) dependerían de la Tesorería, dejando a la capitalina como la única comuna de Quintana Roo sin esas áreas fundamentales para la gobernabilidad y el funcionamiento del municipio y sobrecargando a un área fundamental y muy saturada de trabajo, responsable de que se cuente con la mayor cantidad de recursos económicos y de que éstos sean empleados lo mejor posible en beneficio de la depauperada demarcación.
Solo les importa a los mezquinos y facciosos ediles ganar su guerrita contra el alcalde. La población les tiene sin cuidado, mas confían en su desmemoria.
HELADA MADRINA
Las reflexiones anteriores surgieron de la lectura de la columna Tiro libre, del colega Anwar Moguel, publicada el último sábado. Citamos un par de párrafos de ahí que advierten de la funestas afectaciones a la institución ejecutiva de Othón P. Blanco y de la posible prolongación de sus efectos para futuras administraciones capitalinas:
“Mas en el afán de maniatar a Segovia Martínez, los autores intelectuales del proyecto de modificación al reglamento -dicen que la idea y la asesoría vino desde el Senado- están perdiendo de vista que esta camisa de fuerza afectará no solo al actual alcalde, sino a los presidentes municipales que lo sucedan, lo que puede ser un balazo en el pie para varios de los impulsores de la iniciativa que tienen en su corazoncito el sueño de llegar, en un futuro próximo, a la alcaldía capitalino.
“La apuesta es muy riesgosa y se ve mal, muy mal, ya que desnuda por completo las ambiciones malsanas dentro de Morena que, de seguir por este camino, puede ser castigado por los votantes capitalinos en 2021”.
Todo por reyertas internas, rencillas partidistas y caprichos prohijados por un hombre, malogrado concejal que ya ni siquiera pertenece al cabildo.
Patético.
LA DICHA INICUA
Leemos en conocida columna que afirmar que la hegemonía política del Morena en la XVI Legislatura de Quintana Roo se debe a una razón mal entendida. No tenemos idea si aludió a esta columna en su publicación del sábado o a otra especie o escrito que desconocemos, pero como nosotros afirmamos tal cosa queremos hacer una breve reflexión. Va de nuevo:
Hasta antes del otorgamiento de una diputación plurinominal más al PRI la Junta de Coordinación Política del congreso habría estado integrada por el PAN, el Morena y su aliado, el PVEM. Las decisiones ejecutivas, de gobierno y administrativas, entre otras facultades que tiene la Jucopo eran hasta ese momento facultades que estarían monopolizadas por el partido mayoritario con el apoyo de sus amigos, sin necesidad de negociación alguna con fuerzas ajenas, aunque sean opositoras de oportunidad. El partido de Andrés López tendría predominio total en automático hasta antes de la sentencia de la Sala Regional Xalapa del Trife.
Sin embargo, al igualar en número de escaños (3) el PVEM y el PRI y haber obtenido éste muchos más votos que aquél, el puesto en la Jucopa será tricolor. El Morena tendrá entonces que negociar con el PAN –algo muy difícil– o con el propio expartidazo para sacar adelante las decisiones torales para el Poder Legislativo. Ya no será gratis, y al PRI le cambia favorablemente el balance de poder de manera radical.
Esto en Quintana Roo, en México, en China, en el planeta Tierra, en el Sistema Solar y en la Vía Láctea –suponemos que en las demás galaxias del Universo también–, se puede llamar sin “mal entendido” y en buen castellano pérdida de hegemonía al interior de la Jucopo.
HOMÚNCULOS
Los entretelones del conflicto en el ayuntamiento de Othón P. Blanco residen en la pugna de poder entre los senadores Marybel Villegas Canché y José Luis Pech Várguez. La situación política en términos de realpolitk es confusa, pues el presidente a ambos ha mostrado afecto y dado oportuno espaldarazo, y algunos dirían que hasta les ha amarrado filosas navajas.
GRILLOGRAMA
Manos negras…
No solo un titiritero
Othón P. Blanco padece
Son dos, lo cual nos parece
Un destino bien cul…
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