Fantasma entre los vivos

Solo dos veces en 70 años ha sido indultado un burel toreado por rejoneo en la Plaza México. Publicó El País, acaso el periódico más taurino de la nación originaria del matador a caballo que escribió el más reciente capítulo de esta historia, que “seis años después de su última comparecencia, el rejoneador Diego Ventura ha protagonizado un triunfal regreso a México, indultando un toro de la ganadería de Enrique Fragua frente a más de 40 mil personas que casi llenaban el coso de la plaza Monumental de Insurgentes, en la primera corrida de la Temporada Grande, celebrada este domingo". Esto, que emociona, también puede nublar el juicio y hacer olvidar lo que se hizo o se dejó de hacer en los otros cinco turnos. Por lo pronto la res Fantasma pacerá en los potreros del municipio de Ezequiel Montes, Querétaro, hasta su eventual mudanza al cielo de los astados. El que sabe no necesita tantas palabras para narrarnos lo que pasó en la corrida inaugural del coso de la colonia Nochebuena, así que ofrecemos, con la venia del testigo, lo que con su pluma nuestro matador chetumaleño de la opinión taurina le dijo a Café Negro. Créanos: así fue.

En el primero de la tarde el torero de a caballo, discreto, templado en sus monturas pero mejor el toro. Mal con el rejón de muerte.

Ponce, señor y mandón, el toro bien puesto y codicioso pero flojo de remos, lo que deslució la faena, oreja barata.

El Payo, voluntarioso pero sin recursos de torero, toro soso y avisado, mal con la espada. Silencio.

Adame con hambre de gloria, con destellos de técnica y valor crispante pero con poco toro, tres pinchazos y una estocada entera y bien puesta pero demasiado tardía. Palmas aisladas e injustificadas.

Diego Ventura nos ha dejado ver una monta de altos vuelos, con efectos y piruetas que nos hablan de la extraordinaria doma de sus caballos y de la técnica del jinete. A pie tampoco lució mal, contó con la fortuna de disponer del mejor toro visto en la corrida, mucho y hermoso toro para bordar una bella faena a caballo que quedará para el recuerdo.

Ponce, con su segundo, lo intentó, pero ante la mansedumbre no se puede.

El Payo en su segundo fue cogido, al parecer sin gravedad. Ponce ejerció el ministerio.

Adame, otra vez valiente. Faena interesante e intensa.

En general, buena corrida y buen augurio para una temporada que inicia. Este año me empacharé de toros para despecho de los diputados verdes... aunque no creo les importe mucho.

HOMÚNCULOS

Hasta ahí la crónica de Pedro Flota, mas no podemos evitar notar que recibió del mozo de espadas la de descabello, que puso sobre la cerviz del recién metamorfoseado en moreno partido que acabó también con la milenaria tradición circense en su práctica mexicana.

GUILLOGRAMA

Ecología de proscrito circo…

Si eres verde, tú eres ducho

En hipócritas faenas

Con leyes que causan penas:

¡Comes res y cagas mucho!

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